Por: Julián Domínguez Rivera
22 de abril 2018 , 10:00 p.m.
Uno de los obstáculos más grandes que tiene el crecimiento empresarial en el país, sobre todo de las pymes, es el bajo acceso al crédito y el costo del capital.
Según cifras del Banco Mundial, solo 12 de cada 100 pymes logran algún tipo de acceso a financiamiento, casi siempre de manera informal con consecuencias negativas en su desempeño.
De otro lado, el alto costo del capital hace que las empresas busquen financiarse con recursos propios, que al ser limitados a su vez limitan sus posibilidades de expansión y generación de ingresos.
Lo anterior se convierte en barreras para el crecimiento de las pymes, las cuales constituyen más del 90 por ciento de las empresas del país, afectando el desarrollo económico del país y la generación de empleo formal.
Estudios han demostrado cómo la expansión financiera incide de manera decisiva en el crecimiento económico de las naciones, por lo cual se requieren políticas públicas eficientes para propiciarla.
Es una buena noticia que Colombia esté ad portas de contar con una herramienta que promoverá el fortalecimiento de las pequeñas y medianas empresas, como es el proyecto de acceso a nuevas formas de financiación a través de la factura electrónica.
E-factura, una gran ayuda al hábitat con el ahorro de papel
El desafío tras la incorporación de plataformas tecnológicas
Pocas empresas han implementado la factura electrónica
Relevancia del nuevo modelo en las Pymes
Es importante recordar que la Factura Electrónica tiene dos componentes regulatorios: La factura electrónica para fines de fiscalización, ante la DIAN, y la factura electrónica para fines de negociación, ante el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
La factura electrónica como título valor permite abaratar el costo del capital, además de permitir a quienes sean titulares acreditar un historial para sus perfiles financieros y, a la vez, contar con instrumentos de crédito para apalancar su labor, su capital de trabajo y su expansión.
También tiene un importante efecto en la modernización del país y en el desarrollo del comercio electrónico
Colombia cuenta con alrededor de 9.000 pymes matriculadas en las Cámaras de Comercio. Diseñar nuevas formas de financiación para las pymes es un propósito fundamental en la gestión de las Cámaras de Comercio, con el objetivo de brindar valor agregado a los empresarios, a través de servicios dirigidos a fortalecerlos.
Las implicaciones en torno al nuevo formato electrónico
Una normativa que es un golpe directo al corazón de la evasión
La academia y la novedad tributaria
Que no se le haga tarde para iniciar con el proceso
Mayor transparencia
En momentos en que la corrupción es uno de los principales flagelos que azota al país y al mundo, la factura electrónica contribuye en la lucha contra este mal que afecta la confianza y el crecimiento.
Según las ONU, la adopción de un sistema de factura electrónica permite a los países una serie de ventajas, como la disminución de la evasión tributaria y el aumento en la transparencia.
Esto significa una importante contribución al sector productivo, dado que el peso de la carga tributaria es soportado por un número reducido de empresas.
Asimismo, a la disminución de la informalidad ya que existe consenso en que esta es una de las principales dolencias del país, ya que es una amenaza contra el crecimiento económico, la generación de empleo de calidad y el bienestar de la sociedad, al generar debilidad institucional, menores ingresos fiscales y alto impacto en las empresas formales al sufrir sobrecarga impositiva y competencia desleal.
Permite, además, la modernización de la gestión tributaria, al simplificar el proceso en el reporte de pago de los impuestos, generar menores costos operativos para las empresas, mayor eficiencia y mayor seguridad en la información.
Según una encuesta realizada por la Cámara de Comercio de Santiago, en Chile, país que es modelo en la región en la aplicación de la facturación electrónica, entre los beneficios percibidos de implementar este proceso digital están el ahorro en costos, la agilización de procesos de facturación y pago, y en la generación de libros de compra y venta, la facilidad en el acceso a la información y la disminución de los riesgos de fraude.
En este país Tomas satelitales muestran el crecimiento de las ciudades del mundo, según cifras del Sistema de Impuestos Internos.
Para el éxito en la implementación de la factura electrónica en Colombia es fundamental no solo una amplia difusión de los beneficios de la implementación de esta herramienta, sino una favorable disposición de los empresarios que permita incrementar sus niveles de penetración. Asimismo, la disminución de las brechas tecnológicas en las empresas.
JULIÁN DOMÍNGUEZ RIVERA
Presidente de Confecámaras